Por: Héctor Aguilar
Este lunes 20 de abril se ponen en marcha, según el
calendario del Instituto Electoral del DF (IEDF), de manera oficial las campañas
políticas para aspirantes a jefes delegacionales y representantes para la ALDF.
Y decirnos de manera oficial, porque algunos de ellos ya
llevan meses promocionándose ante la complacencia de las autoridades.
Serán 45 días de contradicciones, enfrentamientos,
escaramuzas, dimes y diretes, mentiras, chismes, acusaciones, videos, audios y
todo tipo de provocaciones que permite el reglamento del IEDF y que debe llegar
a su fin el 3 de junio, cuatro días antes de las elecciones.
¿Usted ya tiene a su favorito? ¿De verdad está seguro de por
quién va a votar? ¿Usted irá a votar? ¿Votará por algún candidato porque le
conviene y tiene que mantener su empleo? ¿Y si le cambian a su candidato
preferido de última hora?
Estas y muchas otras dudas son las que están circulando por
nuestros contactos en redes sociales y nuestro sitio en la web, pero creemos
que las preguntas importantes deberían ser: ¿El candidato que elija de verdad
mejorará la situación de Xochimilco? ¿Hay algún candidato con propuestas y no
promesas? ¿Xochimilco tiene remedio? ¿Le importará al candidato ganador volver
a darle vida a Xochimilco?
Por lo que hemos podido elucubrar en estas semanas, a nuestros
lectores les preocupa lo esencial: ¿dónde quedo yo?
Cuando en esta delegación somos más de 420 mil personas que
en conjunto tenemos que sobrevivir a un Xochimilco en caos constante,
diferente, muy diferente al que vivieron nuestros padres y totalmente cambiado
al que dejaron nuestros abuelos.
La delegación sigue siendo administrada a la antigüita. Haga
de cuenta que el tiempo de detuvo y que nuestros gobernantes son de por ahí de
1961.
La modernidad en Xochimilco ha llegado, y no estamos
hablando de los benditos centros comerciales, tiendas de autoservicio y lugares
de comida rápida, se trata de movilidad, de la cantidad de autos que circulan
por las calles, de la falta de una estrategia de crecimiento solvente y
controlado de la población, de la llegada de gente a asentamientos irregulares
sin control, de propuestas concretas para hacer que esas 420 mil personas o más
encuentran satisfacción a sus necesidades primarias de vida. De crear empleos
cercanos, de regresar a la naturaleza lo que es de ella y de tantas cosas que
nos llevaría todo la página redactar.
Y eso es solo, la joya de la corona: La delegación. Sitio
que hace creer a los aspirantes que vivirán como reyes de épocas pasadas, que
los convertirán en el nuevo Carlos IV, Felipe de Castilla (Felipe el Hermoso) o
ya de plano Ricardo III, de Shakespeare, para salir a la plaza principal y
gritar: “un caballo, un caballo, mi reino por un caballo”.
Así de ridícula es la situación de algunos que suspiran por
llegar a controlar este edificio.
Hace unos meses había 23 candidatos, todos para la
delegación. ¿Y qué pasa con la asamblea Legislativa del Distrito Federal?
Se supone que ahí
definen las condiciones que tendrán cada una de las delegaciones, una pequeña
Cámara de asambleístas que definen el futuro de las 16 demarcaciones, pero esa
no resultaba importante, cuando menos no, para quienes aspiraban a un lugar en
Xochimilco.
Hoy cada partido, incluso el que está en el poder en el DF,
determinó darle poca importancia al recinto de Donceles, tanto así que el
propio PRD le cedió al Panal su lugar en el Distrito 39.
¿Será tan malo ser asambleísta? ¿No hay suficiente lana? ¿O
sí la hay, pero llega más rápido en las delegaciones?
Finalmente, hay que respetar las normas del IEDF, una de
ellas muy clara.
El 17 de mayo es el último día para sustituir a los
candidatos, es decir, los aspirantes que conoceremos en estos días, todavía
podrían cambiar, sí así lo deciden sus partidos.
Y bajo esta premisa los rumores se han soltado.
No dude usted que de los nueve candidatos, no lleguen todos,
porque hay coaliciones, hay acuerdos, pero sobre todo hay ambiciones y estas
últimas son las peores que un pueblo debe soportar.
Bienvenido al arranque de las candidaturas. ¿Está usted
listo para ellas?
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