Decenas de unidades que deberían servir para beneficio
ciudadano están en talleres desde hace meses, y la delegación parece no dar
respuesta
Por: Héctor Aguilar
Dentro de todos los problemas que se viven en la delegación
Xochimilco se encuentra uno que --según nos dice-- está a puto de estallar, de
no negociar con las partes involucradas. Éste es el del parque vehicular de la
delegación, el cual tiene graves problemas de abandono y muy poca voluntad
política para mejorar.
Al contar con amplias zonas de reserva ecológica (o cuando
menos así se denominan aunque en la realidad son ocupadas parcialmente por
asentamientos irregulares), los camiones, tractores, motoconformadoras e
incluso las camionetas de uso diario de empleados, sufren ya los estragos de
los años.
“Son una verdadera porquería”, nos dice Juan “N”, quien nos pidió
guardar el anonimato por temor a represalias de parte de funcionarios
delegacionales.
“Tenemos unidades que llevan años en el taller, porque no
hay dinero para comprar las piezas que les hacen falta. Es una vergüenza que no
se puedan usar camiones que lo único que les falta es cambio de bujías, aceite
o pequeñas reparaciones que son comunes en todos los vehículos. Todo mundo sabe
que un automóvil necesita mantenimiento y cuidado, pero parece que a nuestras
autoridades ya se les olvidó que hay más parque vehicular dentro de talleres
que sirviendo a la ciudadanía”, aseguró nuestro entrevistado.
A simple vista se puede notar el problema, no solo en los
talleres de reparación, donde ya hemos reportado que se encuentran también
taxis y autos particulares que nada deberían hacer allí, y como muestra solo
falta salir a la calle y observar los a camiones delegacionales con llantas
totalmente lisas, que ya perdieron su dibujo y que se pueden convertir en un
peligro para la ciudadanía, debido a las rápidas bajadas de algunas zonas de la
demarcación.
“Estamos usando camiones con llantas que debieron haberse
cambiado desde hace dos o tres años, ya no tienen dibujo. ¿Y qué pasa si nos
quedamos sin frenos o si las llantas no responden? A nosotros, a los
compañeros, nos van a culpar por estar trabajando con unidades que no cumplen
con los requisitos mínimos para salir a la calle”, continuó.
Al cuestionarle sobre el número de unidades que s encuentran
en desuso nuestra fuente no supo darnos un dato exacto, pero mencionó: “Son
muchas, más de las que anda afuera. Ya lo sabe el ingeniero Cámara, ya nuestros
representantes les han dicho (a los funcionarios) y no nos han hecho caso”, por
lo cual amenazó: “Tenemos una fecha interna para esperar, pero si las cosas no
mejoran podríamos pensar en una manifestación o de plano no trabajar hasta que
alguien tome cartas en el asunto, porque esta situación cada día va empeorando
y los único que vamos a pagar cualquier accidente somos los trabajadores”.
Por cierto, Juan no quiso compartirnos la fecha de su paro
laboral.
