Mañana inicia formalmente la Feria de Xaltocán, una de las celebraciones más tradicionales de Xochimilco, pero también uno de los eventos más problemáticos en la demarcación, debido a la cantidad de días que se ve afectada la circulación de una de las arterias principales de la zona, la Avenida Prolongación División de Norte.
En la época de la colonia Xaltocán no tenía la denominación de barrio sino rancho, éste era propiedad de los caciques de Xochimilco, quienes lo donaron "al convento de San Bernardino de Siena como capellanía, que a la secularización cambio de propiedad del convento a los hacendados y después por venta se transformó en el actual barrio.
En ese lugar se construyó una iglesia, dedicada a Jesús, luego a la Candelaria y finalmente a la Virgen de los Dolores, su edificio data, según retablo, del año de 1751.
"Es un verdadero problema. Cuando está la fiesta tengo que perder, cuando menos, media hora más para pasar. La fila de autos llega hasta donde comienza la esquina del deportivo, o sea, que toda la avenida enfrente de la delegación, está a vuelta de rueda.", nos dijo Avelina Mondragón, quien todos los días tiene que salir de Nativitas para llegar a trabajar a Villa Coapa.
"Es uan falta de respeto para los demás. La 'bendita' celebración afecta toda esta zona (Xaltocán y lugares vecinos). Es un desm.... pasar por aquí, y lo peor es que no hay otra forma de salir. Afecta a quienes vienen de Milpa Alta, a quienes salimos de Xochimilco y hasta a quienes quieren entrar al centro de Xochi. Es una verdadera calamidad", nos dijo José Hernández, un comerciante, quien con su vieja camioneta tiene que entrar todos los días al centro de Xochimilco a comprar mercancía para su venta.
"Yo llevo a mis hijos a una escuela aquí mismo en Xaltocán, y ya sabemos que tenemos que levantarnos más temprano por tanto tráfico y salir de aquí... uuff… luego le cuento", señaló una ama de casa a quien entrevistamos en su auto.
"No tengo nada contra la celebración, pero ¡¡¡¿15 días?!!! Me parece un abuso, es demasiado. La delegación debería meter mano porque, incluso, les afecta a ellos, con tanto tráfico no llegan a tiempo, ni sus propios empleados", señaló otro conductor.
Lo cierto es que las condiciones actuales no son aquellas de cuando se comenzó a festejar a Nuestra Señora de los Dolores y el tráfico actual no tiene nada que ver con una celebración, más bien hay que hacer cambios y adecuarse a las nuevas etapas que vive Xochimilco, un lugar contaminado por todas partes y, en esta ocasión, también por las costumbres.
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