#XOCHIMILCO: El voto, el candidato y las clases sociales / Opinión

Por: Héctor Aguilar

Fotos; 20minutos y Google

Nunca antes como ahora las votaciones del próximo 7 de junio se encuentran tan divididas en Xochimilco. Durante las pasadas seis administraciones ya se tenía una idea de quién seguía en el cargo como delegado. En 18 años el PRD ha levantado el dedo y ordenado al sucesor del delegado en turno. Hoy, con un partido totalmente fragmentado, las cosas han cambiado e, incluso, el voto será un reflejo de las clases sociales.

El PRD ha dominado en el gusto electoral de alguna parte de la gente, sobre todo los que más necesitan, que son obligados a dar su voto al Sol Azteca mediante la entrega constante de dádivas, de bajar programas del GDF a nombre del candidato en turno y de aniquilar las esperanzas de esa gente que no tiene ni siquiera un lugar propio donde dormir.

Esas personas están totalmente coptadas por el partido, ese es el voto duro del PRD para los comicios de junio.

Pero en Xochimilco hay otro tipo de gente, la que tiene un nivel de estudios más alto, la que vive en zonas con mejor estructura económica y la que, precisamente, no sale a votar cada tres años.

Esa gente también está harta de dejar que otros decidan por ella, esa gente no vive las mismas dificultades que las personas más pobres de la demarcación, pero esa gente no ha encontrado en algún candidato la solución a sus problemas, y eso ha sido aprovechado por el PRD para llevar seis administraciones seguidas en el poder con resultados muy criticables.

La gran pregunta de este 7 de junio será: ¿Esa gente de clase media y alta se tomará un tiempo para ir a votar? Porque de ser así, generará el cambio que tanto añora. De tomarse un momento e ir a depositar su voto romperá cadenas, pero sobre todo pondrá en jaque al PRD, que, como cada tres años, no espera que usted se levante de su cómodo futón, de su cama de Liverpool y de despegarse de izzi por unos minutos para compartir un voto que podría ser el cambio que todos esperamos.

Hoy, a diferencia de otros años, hay una rebeldía palpable en Xochimilco hacia el partido en el poder, hacia la candidata que apoyaron y hacia la forma en que Xochimilco se está cayendo a pedazos.

Hoy más que nunca, hay un voto que malamente podríamos llamar “de clases sociales”. Lo cual, no debería estar pasando, pero la propia administración lo ha generado a través de sus conductas con empresarios y familias, quienes con mucho o poco mueven a Xochimilco y que no son los vendedores ambulantes, los paracaidistas que llegan de otros lados, ni las personas más necesitadas.

En esta demarcación hay poco menos de 320 mil personas que pueden votar este 7 de junio. El PRD va por 45 mil votos o menos. ¿Por qué le digo que “o menos”? Sencillo, porque mientras menos personas como usted, que disfrutan de internet, con una vida tranquila y un buen empleo voten, ese partido necesitará menos votos de la gente que solo estira la mano o vive del presupuesto.

Las cifras no son nada complicadas, mientras menos votos haya de la gente de colonias de clase media y alta, menos votos se requerirán de la gente pobre. Mientras más votos haya de la clase media y alta más votos requerirá el partido en el poder para vencer. Sin embargo, en esta segunda sumatoria hay una clave, porque el PRD tiene cierto número de personas, que podría llegar hasta los 50 mil si lo requieren, más o menos, pero no podrán defenderse si ustedes, nuestros lectores, amigos y seguidores cautivos, meten 180 mil votos de los 320 mil que podrían presentarse, según el IEDF.

Si usted de verdad quiere hacer un cambio en Xochimilco, vaya y vote, de veras; no es una mala idea dejar de ver el México-Brasil e ir a sufragar. Yo sé que usted me ha comprendido, son entre 20 minutos y 1 hora lo que “va a perder” (así, entre comillas, porque en realidad lo va aganar en el futuro) y entonces, cuando esto suceda, podremos pensar en el inicio de una recuperación de Xochimilco.

Piénselo, mientras eso no suceda, ni siquiera se imagine un Xochimilco diferente, porque ya nos dejaron claro durante 18 años que pintado de amarillo Xochimilco no va a progresar.

PD. Esta no es, de ninguna manera una opinión que trate de soslayar el alto valor de la gente de escasos recursos, ni mucho menos. Al contrario, reconocemos a esas personas que deben realizar un doble o triple esfuerzo para salir adelante al estar con el pie en el cuello por parte del gobierno local. Aclaramos que ellos tampoco están de acuerdo con lo que pasa en Xochimilco, pero no les dejan opción. No obstante, esta también es una realidad que vive Xochimilco y que a la hora de las elecciones sale a flote, pero de la cual nadie habla.