Por: Lupita Sánhcez
No fue fácil regresar y tampoco será fácil mantenerse con
una columna de política, que, seguramente, pisará michos callos, pero que,
siguiendo la fuerte y crítica línea editorial de este medio, cumplirá con las
expectativas que me han exigido.
Sé que para muchos no hay futuro en Xochimilco y Tlalpan,
sé, también, que en mi blog y mis redes sociales soy explosiva y hasta iracunda
con algunos. Pero esto será diferente.
Esto es POLITIMILCO, una columna seria para un medio serio,
que ante todo busca que todo esto mejore. Sí, habrá comentarios que no gusten,
otros positivos, pero todos para que USTED se forme una OPINIÓN, para que todos
vayamos a las urnas el 6 de junio (si es que hay elecciones, claro, por la
pandemia) con u na idea clara de POR QUÉ voy a votar por alguien a quien en realidad
no conozco, pero pongo mis esperanzas en él.
¿Sabe cuál será mi principal objetivo en estos textos? Que
usted SALGA A VOTAR, sin importar por quién lo haga, pero convencer a la
población, a esos empresarios, a esas personas que sienten que no están mejor que
antes, a todos aquellos que perdieron su empleo, su forma de vida, todos esos
que perdieron a un familiar querido por este maldito virus, pero que también
saben que con una mayor y fuerte campaña de parte del gobierno se hubieran
salvado muchas vidas, tal vez las vidas de sus propios familiares.
POLITIMIILCO es para ellos, para que estemos convencidos de
que hay que ir a las urnas el 6 de junio, y votar, sin importar por quién sea,
pero votar.
Que ¿quién soy?, muchos me conocen, me han seguido, soy
graduada en comunicación y marketing por una universidad de paga, con maestría
y diplomados en varias áreas, pero sabe qué… eso no importa cuando se trata de comunicarse
con la gente.
Aquí les daremos toda esa información incómoda que nadie
dice, porque todos tiene cola que les pisen. Habrá crítica, habrá apodos, habrá
soberbia, pero lo que más habrá será verdades, de esas que no se cuentan porque
al final todo mundo busca un hueso (yo tengo empresa, no necesito el mío, por
cierto).
Así que gracias de nuevo a Héctor, y estoy segura que lo que
viene, será para sumar, pero sobre todo para que Xochimilco salga de ese
marasmo… esa idea de que “mi voto no vale”. Claro que vale, y a partir de hoy,
valdrá más.
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