#Xochimilco. Los retos de Circe y el hedor a traición que sobrevuela la alcaldía / Opinión

La alcaldesa electa en Xochimilco se va a enfrentar a un panorama lleno de desafíos, y aunque puede ser su principal motivación, el camino está lleno de “lobos con piel de oveja”.

 Héctor Aguilar

Desde su designación como candidata a Xochimilco por el Partido del Trabajo, la muy joven alcaldesa electa Circe Camacho sabía que el camino estaba lleno de desafíos, amenazas, retos, o llámele usted como quiera, pero el sensor de peligro se activó desde aquella decisión que vino, sin duda, desde el Palacio de Gobierno capitalino; es decir, desde la hoy presidente electa Claudia Sheinbaum.

Y dicho reto no era solo con los rivales, fue con los mismos “aliados” (que de aliados solo tienen el nombre) porque la expectativa siempre fue “poner el pie” y “dar patadas a quien se deje”.

Doña Circe se mostró líder, hay que decirlo, sabía que tenía el apoyo desde la doctora Shein, y eso la posicionó hasta ahora, que sigue subiendo a tribuna en el Congreso de la Ciudad de México, de donde sigue siendo legisladora.

El problema vino en la elección, donde la gente de Morena le puso una alfombra roja, llena de pétales de rosa, que por debajo traía una serie de conflictos generados a lo largo de seis años, que todo mundo conocía, pero que, como buena negociadora, quedaron bajo la cubierta, hasta que llegaron los resultados del 2 de junio.

Créanme, pelear contra los enemigos es muy complicado, pero pelear contra tu propia gente, la que se supone que te apoya, es el doble de complicado. Y esa traición es doblemente penada y castigada.

Hoy Circe se enfrentará a un ala de Morena que no la quiere, que no la considera parte de ese partido, y, por otro lado, el desplante que le hicieron desde el Gobierno Federal a Gerardo Fernández Noroña, no dejó bien parado a un partido que, recordemos, fue fundado allá por el año 1990, pero que hace menos de 10 estuvo a punto de perder su registro.

Los retos de Circe serán varios y muy concisos, y ya olvídese usted de la seguridad, la entrega de pipas, la basura, la movilidad, el medio ambiente, no. Aquí tiene que poner orden desde su estructura, desde las personas que la apoyaron y que tendrán la responsabilidad de hallar formas para gobernar a su estilo, con forma propia y lo mejor de todo, con RESULTADOS:

Imagine usted que nunca ha gobernado y de repente, se saca la lotería y obtiene el poder. Todo el poder de un pequeño partido en una alcaldía. ¡Wow!, qué difícil debe ser.

Lo cierto es que, por el momento, hay dos personas que han salido a dar la cara, quizá no de forma popular, pero sí con reuniones con gente importante, líderes, empresarios, trabajadores, medios de comunicación, y eso habla de que tanto Carlo Camacho (que hasta donde sabemos no tiene relación familiar con Circe) y Aurelio de Gyves, quien es el Concejal 1 de la alcaldía por el PT, están haciendo buena chamba.

Los más escépticos pensarán que Morena tiene controlada a la alcaldesa electa, pero no hay una resolución más equivocada; de hecho, la propia Circe podría dar una sorpresa durante los primeros meses de gobierno, si la situación con “Changoleón” Noroña no mejora y serán sus primeros 100 días de gobierno, muuuuuuy importantes, porque desde ahí la gente que votó por ella observara si respeta su propio camino o se “alínea” a los mandatos desde el verdadero poder.

Los retos son grandes, porque las promesas no fueron muchas en la campaña. Pero los sueños y las necesidades de la gente sí lo son y, hasta el momento, los cercanos a Circe han trabajado bien, veremos cómo le va a la protagonista de esta historia, que después de Guadalupe I. Ramírez y Estefanía Chávez, se convertirá en la tercera mujer que encabeza el poder Ejecutivo local en Xochimilco. Al tiempo.