Vaya primea semana para el primer alcalde en la historia de
Xochimilco, José Carlos Acosta, quien luego de tomar posesión en el nuevo
Congreso capitalino se fue a celebrar a lo grande- Tal y como lo están haciendo
muchos de los integrantes del partido al que pertenece.
Se olvidó de la austeridad republicana y para dar la
bienvenida a su gobierno, Acosta se rentó un superescenario, con pantallas
gigantes, bases de aluminio sólido y sillas por doquier para afirmar que su gobierno
respetará los mandamientos del supremo hacedor, AMLO.
Nervioso, sin preparación en el escenario y con un discurso
flojo y demagógico, a pesar de ya haber estado en las administraciones de
varios ex delegados, Acosta enfrentó dos que tres rechiflas en su toma de protesta,
pero el problema vino después, cuando en su primer día de labor, se fue a San
Gregorio a pintar postes y banquetas, ante la mirada incrédula de sus
habitantes, quienes todavía no cuentan con apoyo necesario para levantar sus
casas, luego del sismo del año pasado. Ahora un va y está todo pintado, pro sin
casas.
Al día siguiente nos fuimos
a Tulyehualco, donde Acosta anunció la inauguración para fin de año, de
un museo en honor a Quirino Mendoza, quien desde el cielo le pudo haber
agradecido con su “Cielito Lindo”, el problema es que Tulyehualco tiene muchos
otros problemas que son más importantes
que reconocer al prócer de Xochimilco.
100 personas acompañaron al alcalde, mientras otras miles sufren para
llegar a ese punto, porque no hay solución para la Carretera
Xochimilco-Tulyehualco, el transporte público, la inseguridad, en fin.
Por ello, implementamos el hashtag #CosasQueUrgen con el que
buscamos informar al jefe del ejecutivo ocal sobre los problemas que de verdad
URGEN en Xochimilco, ya que al parecer o no quiere remediarlos o no tiene
conocimiento de ellos. Gracias a ustedes que han apoyado esta solicitud en
Twitter. #Xochimilco #CosasQueUrgen
Apenas 24 horas más tarde, en su cuarto día de labor,
nuestro alcalde ya mando traer a los granaderos, ya que unas 40 personas de
Nativitas, quienes protestaban porque no tenían agua, le cerraron el crucero
por unas horas, pero en lugar de privilegiar el diálogo, como anunció en su
campaña y como lo dijo AMLO, Acosta levantó el teléfono rojo y mandó traer dos
camiones llenos de elementos policiacos, que, afortunadamente, no se
requirieron, pero sentó el precedente de que quien no esté de acuerdo con él, será duramente reprimido.
(Qué no entendió la celebración de los 50 años del 2 de octubre).
Y para cerrar con broche de oro, un video que deja al
descubierto la forma de operar, de un grupo que le roba sus pertenencias a le
gente y su graba para tener pruebas de que fueron ellos (porque según la
alcaldía no es gente que trabaje en vía pública de esta administración) le pegó
con todo al caballero del chaleco y los pantalones arremangados, ya que la
gente culpó de inmediato a su gobierno por los hechos que afectaron a una
persona de la tercera edad, que trapeaba la calle tratando de defender sus
pertenencias, ante tres gorilas que se las quitaron.
Se supone que existen protocolos, procedimientos y leyes
para retirar al comercio ambulante de las calles, ¿no? Si fueron inspectores de
vía pública, muy mal, porque dejaron en ridículo a esta administración, sean o
no parte del actual gobierno.
Y el linchamiento mediático fue tremendo para don José Carlos,
quien comenzó su gobierno, con el pie izquierdo (como el brazo que levantó cuando
tomó protesta en el Congreso).
Y ya no hablamos de la repentina desaparición de sellos de clausura en todos lados... y esto apenas comienza…
Por: Héctor Aguilar
Director editorial general
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